sábado, 23 de octubre de 2010

La residencia

fotos

La residencia en la que vivimos (y que tan amablemente nos indicaron por medio de la empresa LC Mobility, a la cual pertenece la famosa Julie, la chica que nos recibió cuando llegamos) se encuentre realmente, fuera de Grenoble. Por lo menos eso dice en los mapas. Está ubicada en una ciudad completamente aledaña y de dimensiones ridículas (lo cual hace pensar que en realidad es un barrio) llamada Saint-Martin D'Hères. Lo cual torna a la misma de una ubicación levemente desfavorable (del centro de Grenoble, la ciudad adhosada a la izquierda).



El nombre que tiene es "Houille Blanche" (uí blansh), la cual recibe estudiantes todo el año, de infinitas nacionalidades. Vale aclarar un hecho lamentable hace unos días, una chica de nacionalidad china se suicidó saltando por la ventana. Un brasilero conocido la vio en el suelo, Por suerte, no la conocíamos.

Más allá de eso, la residencia es muy habitable. Sus principales ventajas son el precio y la relativamente buena calidad de las piezas. Sus principales desventajas son la distancia a todos lados (sobre todo, de noche el colectivo no funciona casi), y la mala onda que suelen tener las personas que atienden. La mayoría no habla español ni inglés,  ni están interesados en tus necesidades. En general uno siente que los molesta cuando aparece en la recepción, incluso para pagar...
 

El precio de la misma no es muy alto (280 euros), y no tenés que pagar luz ni agua, ni nada más, el precio si querés internet en la pieza es de 20 euros, que porsupuesto todos pagamos, excepto una sóla persona, quien cuando lea esto sabrá de quién hablo :P. También existen otras posibilidades, como ponerte un router, y dar internet, pagando entre varios, etc.

Las habitaciones no cuentan con baño ni cocina, pero a esta altura no me molesta para casi nada. Yo estoy en el edificio "C", el cual tiene 3 pisos. En total hay 6 edificios, de los cuales 3 están pegados. Cada piso tiene además de las piezas, 3 cocinas (grandes), 6 duchas, 9 baños, y muchas piezas. Todo herméticamente separado entre sí, lo cual le da una ventaja, sobre todo al baño y las duchas (que están separadas).



Siguiendo con las instalaciones, existe una pileta bastante grande, varios metegoles, varias máquinas (café, bebidas y sandwiches), lavarropas y secarropas (en extremo una ventaja), estacionamiento, cancha de básket, pianos (?) y un montón de pasadizos que vamos descubriendo a medida que se organizan fiestas (como por ejempo un día que se despidió una belga, una habitación para hacer fiestas debajo de un lugar donde hay un piano).




La entrada a la residencia tiene lugar por medio de un aparatito que te dan con la llave, la cual pasás  por unos sensores y entrás. Lo mismo ocurre al entrar a los edificios o al entrar a la recepción. La desventaja es que si te olvidás la llave en la habitación (uno suele dejar todo abierto), bajás a buscar algo por ejemplo al lavarropas y pretendés subir, no lo vas a lograr. Ese truco lo aprendí rápido por suerte, hay que estar con las llaves en todos lados. Este tipo de problemas están en todo momento y en todo lugar, cuando sos nuevo en la residencia sos especialmente propenso a que pierdas mucho tiempo yendo y viniendo de forma ineficiente.  Por ejemplo para lavar la ropa necesitás unas monedas que están sólo en la recepción, que requieren monedas de euro para ser compradas: por otor lado necesitás la ropa y las cosas para lavarla; suponiendo que las cosas para lavarla la tenga alguien de tus amigos, tenés que entrar al edificio de tu amigo (para esto tenés que tener la llave), pedirle eso, bajar con eso a buscar las monedas (tenés que tener cambio!) y luego esperar que no haya mucha gente lavando la ropa (hay pocas máquinas, y algunas se rompen a menudo). Con lo cual el tiempo desaparece rápida y completamente. También hay que tener en cuenta que cierra cerca de las 12. Con el tiempo, uno se acostumbra un poco y puede reducir estos trastornos...



La mala ubicación de la misma hace que de noche sea prácticamente imposible salir a comprar algo para tomar o comer, y si bien esto te pasa en cualquier lugar (cierra todo excesivamente temprano), en nuestro barrio es mucho peor.

Concluyendo, un buen lugar a un precio barato, que vale la pena.. a pesar de algunas cosas que podrían mejorarse.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Avignon

fotos

"Sur le pont d'Avignon
On y danse, on y danse"

"Sobre el puente de Avignon, todos bailan, todos bailan...", dice la canción infantil que no conocía, pero la mayoría de la gente conoce.  Eso sí, bailar sobre el puente es difícil porque hay muchísimo viento y es bastante chico :).

El puente es de la edad media. La ciudad es famosa porque los Papas estuvieron residiendo en ella durante 400 años aproximadamente.  Sin embargo hoy por hoy el puente está roto y hay puentes completos al lado :).


Nos levantamos bien temprano en Marsella y fuimos a preguntar sin muchas esperanzas para ir a Avignon. Pero por suerte había un tren. Así que llegamos, pero teniendo en cuenta que teníamos que volver de alguna forma, por lo cual fuimos a preguntar y nos dijeron que seguro a la tarde había un tren para llegar a Grenoble, pero haciendo escala en Lyon, es decir, 2 trenes. No tuvimos en cuenta si nos escuchó o nos despachó directamente.

La ciudad está genial, es muy turística. Me gustó más que Marsella. Es una ciudad no tan chica completamente rodeada por una muralla. Fuimos a la agencia de turismo después de desayunar, y pagamos 10 euros para entrar al castillo y al puente. Así que salimos directamente para el puente. Está bastante bueno...



Te dan una guía auditiva que te va diciendo todo en español (en nuestro caso), por ejemplo la historia de la canción, que fue cambiando desde hace varios siglos, cuando tenía un estilo tipo ópera.

Una vez terminado nuestro recorrido fuimos a comer, enfrente del puente. Te lleva un bote gratis para cruzar.




Por supuesto la comida otra vez estaba bárbara, y el restaurant tenía vista al puente. Me tomé un café para no dormirme después de comer y volvimos a cruzar (esta vez por el puente entero) para poder ir al castillo.

El castillo me volvió a dar asco por lo bueno que estaba. Me dio asco porque otra vez los papas no se andaban con chiquitas.

El castillo es impresionante por donde se lo mire. Muy grande y lleno de lujos. Una parte era la tesorería del Papa, donde la gente arroja monedas vaya a saber uno creyendo qué va a pasar por eso...


Más tarde, encontramos a un tipo que tocaba música conocida con una especie de orquestita que tenía


Así que nos quedamos ahí un rato. No hay mucho más para decir del castillo.

Había que emprender el regreso.. fuimos a la terminal a buscar el viaje que nos llevara a Lyon, y por suerte lo encontramos. El tren estaba completamente lleno y algunos tuvieron que sentarse en los pasillos. yo tuve suerte. Igual el tren llegó en una hora (va muy muy rápido). Entonces, al llegar a Lyon, nos avisaron que el tren que nos llevaría a Grenoble estaba suspendido. Sólo quedaba un colectivo para volver cerca de las 9. No nos quedó otra que comer y salir corriendo para agarrar el colectivo, que por supuesto estaba lleno de gente esperando que abran. Parecía el Titanic: "mujeres y niños primero", tuvimos que empujar para entrar, o nos empujaron, no sé... entramos y nos sentamos, había gente parada...

Y mucha gente afuera del último colectivo. Entonces avisaron que pondrían 2 colectivos más, con lo cual pudieron llegar a Grenoble, no es muy interesante sufrir de esa forma para llegar...

En el colectivo había al lado nuestro una pareja argentina con una nena, y la suegra que estaba de visita. Así que volvimos hablando con ellos, hacía 7 años que vivían acá... de hecho ella había trabajado de administrativa en inria...

Llegamos entonces a nuestra deseada residencia. Como siempre, el viaje tuvo esa adrenalina que sólo podés pasar si estás en Francia un tiempo.

martes, 19 de octubre de 2010

Marsella

Fotos: picasaweb.google.com/rbaravalle/Marsella

En medio de una protesta sindical, aunque sin saberlo al comprar los pasajes, decidimos hacer un viaje no tan pesado hacia Marsella, y hasta Avignon, la cual prometía tener un castillo medieval a todo trapo. Y era cierto..

Comprar los pasajes no fue tan sencillo porque los compramos sobre la hora y se iban agotando a medida que pasaban los.. minutos!, en internet encontramos de casualidad como llegar, cambiando varias veces qué día ir a Avignon y qué día ir a Marsella. Finalmente encontramos una configuración perfecta. Pero no era perfecta, tenía protestas sindicales junto a ella, aunque me iba a enterar en el camino.

Así, el viernes a la tarde y para no perder la costumbre, nos damos cuenta que probablemente no viajaríamos, porque se suspendía el tren. Tuvimos que ir a chequear personalmente que íbamos a hacer (en el centro de la ciudad, no muy cerca del INRIA), y finalmente terminaron diciendonos que nos subamos al tren y las escalas que teníamos que hacer. Por supuesto había que levantarse mucho antes, tipo 5, para tomar el 33 que pasa enfrente de la residencia y llegar a la terminal a esperar el tren, que iba por suerte a Marsella. Acá las protestas tienen la característica de que cortan ciertos trenes y otros no, no son totales generalmente, o por lo menos nunca me tocó una total, con lo cual la emoción sube :).

Marsella estaba muy sucia. Suponíamos que era por la protesta. Pero no sabemos. Lo mejor que vimos ahí fue el puerto y los calanques. El puerto tiene muchísimo viento. Volví a sentir el frío estilo invierno de Argentina. Por cierto, el francés es distinto, se entiende mucho más (bah lo poco que entiendo) que en Grenoble, que hablan bastante cerrado. Entre otras cosas, vendían los jabones de Marsella, que son famosos aparentemente. Comimos unas milanesas de pollo! recorrimos un poco el puerto y el circuito turístico, que está marcado en rojo en las calles...




Fuimos a una catedral y decidimos ir a los Calanques. Son las entradas del mar a la ciudad, están muy muy buenos. Tomamos un colectivo, después de darnos cuenta que por la protesta había que tomarse 2 subtes antes, para llegar a un área donde los colectivos pasaban. Vimos el estadio de fútbol desde afuera (supongo que del Olympique de Marsella, no hay fotos, ibamos en el cole :() y llegamos al lugar, en el cual los carteles decían una hora caminando... pero valió la pena.


Volvimos tipo 7 y decidimos ir a ver la Notre Dame de Marsella, que estaba arriba de la montaña, pero nos quedamos con las ganas, porque no iban más colectivos. Al menos la vimos desde abajo :).


Salimos para el hostel, nos bañamos y volvimos a comer a algún restaurante. El nivel de cansancio alcanzó extremos insospechados. La comida del restaurante fue sublime. No puedo ponderar lo rica que era, un entrecot con tortilla si mal no recuerdo, era cara y poco abundante, pero el gusto tapaba bastante este defecto.

Por si fuera poco, el agua es tenedor libre en los restaurantes franceses que conozco. Eso es sencillamente un lujo que hace que te concentres en el gusto de la comida, olvidándote del resto.

Nos fuimos a dormir y nos levantamos para ver donde ir, porque a la tarde nos avisaron que a Avignon era imposible llegar, que preguntemos por las dudas al otro día. Yo me confié de mi extraño don, el de sufrir el llegar, pero terminar yendo siempre, y aposté bien.

Nos levantamos  temprano y salimos para la ciudad del cuento de hadas, la cual contaré en mi próximo post (lo hago mañana porque me duermo!).

a bientót! (hasta luego).

lunes, 11 de octubre de 2010

Grenoble!

Habiendo pasado este fin de semana en Grenoble (al fin nos tomamos uno para descansar de los viajes), procedo a intentar contar como creo yo (después de un mes y 10 días) es la vida en esta ciudad. Por supuesto que mi intención es osada, propensa a cometer numerosos errores al intentar describir cómo se vive habiendo visto muy poco... así que tomenlo más bien como una impresión que se lleva un extranjero, que podría estar acertada hasta cierto punto de cómo es la vida en Francia, o más precisamente, en esta ciudad al sureste del país...

Las fotos están en:
picasaweb.google.com/rbaravalle/Grenoble
Grenoble fue sede de los juegos olímpicos de invierno en 1968. Lo cual puede sentirse hasta el día de hoy al caminar por las calles. Sobre todo por la calle "avenue des Jeux Olympiques" :D, que es la que pasa por la residencia (debido a lo prolongado de la explicación que quería introducir, la residencia la cuento en otro post).

La primera impresión que tuve de Grenoble cuando llegué, fue prolijidad y limpieza. Y no la cambié. Realmente la ciudad es en extremo limpia, los autos van ordenados como si fueran controlados por una computadora y todo está en el lugar que debería estar, en perfectas condiciones. Esto deduje, es consecuencia del alto nivel de vida al que están acostumbrados los franceses, al dinero con el que cuentan y a la mentalidad que tienen. Da impresión caminar por la avenida de los juegos olímpicos (pero no es la única), debido a que los baches sencillamente no existen, las veredas no tienen un sólo papelito tirado (tal vez alguna colilla de cigarrillo) y todos los elementos están en perfectas condiciones (tachos de basura, carteles, luminarias...). Es una ciudad de ricos.




Los parques tienen una belleza importante también. Es una gran satisfacción poder ir a tomar mates una tarde (como hoy) en el medio del pasto de un parque). De noche, la impunidad que uno siente al caminar sin sentir miedo, incluso por los parques más oscuros, es impagable. Y por si fuera poco, es costumbre que los autos paren cuando pasás (aunque no es 100% así). Grenoble está rodeada de montañas, y se están empezando a nevar. Lo cual le da un parecido al sur de Argentina.




Cuenta con una población de 160.000 habitantes, lo cual la hace perfecta para la vida. La seguridad es del 99.9% en general, pudiendo dejar la puerta abierta en tu pieza sin el menor problema. Se sabe que existen robos, pero parecen ser un mito. Además, se conoce que es deporte nacional la quema de autos. Los chicos, antes de que lleguemos, pudieron ver uno. Y como verán en las fotos, hay una moto incendiada. Es decir, o no pasa nada, o son muy extremistas.

La distribución de las calles está hecha para confundir a los turistas. O eso parece, no existe prácticamente una calle derecha por más de 300 m. Grenoble tiene numerosas peatonales pero también pueden pasar autos (lo que las hace peatonales, es que pasan muy pocos..). El servicio de colectivos y de tranvías es derechista. Si te equivocás no te perdonan, tenés que esperar mucho tiempo, (por ejemplo, una hora) y las distancias están puestas de tal forma que tengas que perder el día para ir de un lugar a otro. Lo bueno es que podemos pagar una tarifa fija por mes y utilizar tantos transportes públicos como nos plazca, lo cual es un GRAN placer. Los colectivos y tranvías, por supuesto, son espectaculares, y en cada parada de colectivos hay un mapa para que no te pierdas. Otro servicio, que uno puede pagar, es alquilar una bicicleta por varios meses. Aunque mucho no me animé, por el frio que se viene, no así Julieta y Nicolás, quienes tienen una cada uno.

La vida en Grenoble es cara. Aunque no lo notamos mucho, porque tenemos varios subsidios. Por ejemplo, en el trabajo a la hora del almuerzo, en lugar de pagar 6 euros terminamos pagando 2, te subsidian un proporcional de lo que comprás. y por supuesto la comida es muy buena, aunque a veces carece de variedad. También nos subsidian el transporte, aproximadamente la mitad. Sin embargo, comemos por 2 euros en promedio con lo que compramos en el mercado (una comida excelente por cierto). Lo cual es caro aparentemente!. Por supuesto, la gente gana más y gasta menos que en mi país.

La vida en Francia en general, creo que la voy a contar después de visitar más ciudades francesas, para ser más justo...

Resta por contar cómo es la vida en invierno. Aparentemente el frío es muy intenso. Veremos qué atractivos nos ofrecerá la zona (existen pistas de ski...)

miércoles, 6 de octubre de 2010

Tocando las puertas del cielo (Ciudad del Vaticano)

La primer sensación que sentí fue de escalofrío. La entrada a la plaza de la famosa iglesia me provocó esa sensación que nunca antes sentí por ningún lugar. Es enorme. El lujo que presenta es sólo comparable a los miles de años de historia que deja traslucir.

Creo que el párrafo anterior resume todo Roma. Acá están las fotos:


picasaweb.google.com/rbaravalle/CiudadDelVaticano
picasaweb.google.com/rbaravalle/Roma

Para comenzar, la nota de color del viaje. Teníamos que tomar el avión en Lyon (no salen desde Grenoble) a las 9, así que nos levantamos muy temprano (tipo 4) para tomar el cole tipo 5, para llegar a Lyon a las 6 y pico, y hacer el check-in. Nos confiamos, y fuimos directamente a desayunar. Se hicieron las 8 y media, y nos fuimos corriendo, cuando nos dimos cuenta, hacia la puerta donde había que hacer ese desagradable trámite. Cuando llegamos no había nadie, solamente la mujer que hace el check-in, clara seña de que había terminado y no podíamos viajar. Eso fue lo que nos transmitió dicha persona. Yo era el único que tenía impreso el ticket (con lo cual, no era obligatorio hacer el check-in) así que casi viajo sólo. Por suerte, la mujer se apiadó y nos dejó pasar. El comienzo entonces fue como todos mis viajes.

El viaje en avión estuvo bueno porque pudimos ver las nubes desde arriba (es impresionante) y unas montañas raras que no parecía que lo fueran. Y no lo eran, lo que vimos fue la nieve de los alpes sobre la montaña, lo cual formaba una vista indescriptible (no tengo fotos, no estaba del lado de la ventanilla)...

Así llegamos al aeropuerto y tomamos oootro medio de transporte que nos llevó al centro de Roma. El hostel estaba bueno..



Después de un rato, dejamos las cosas y nos fuimos derecho para el Vaticano. La plaza no tiene descripción alguna. Saqué en total 300 fotos (ver las que tengan ganas, se me fue un poco la mano). No te cansa sacar fotos, es impresionante. Un lujo detrás del otro. Una vez que saciamos nuestro apetito del lugar, fuimos a buscar una guía turística que nos salió 20 euros pero nos llevó explicando todo, estuvo bueno. La guía, como ella decía en tercera persona, se llamaba Stephanie.


Recorrimos todo el "museo del vaticano" que tiene todas las riquezas que la iglesia no pudo esperar para acumular en el cielo y empezó a acumular en la tierra. 2000 años de dinero regalado, en gran parte.

Recorrimos entre otras cosas la capilla sixtina, aunque mucho no se puede estar, el lugar parece empapelado, y el hecho de saber que fue pintado hace 500 años te pone la piel de gallina. Si bien dice "prohibido sacar fotos", la saqué sin flash y por otro lado TODO el mundo saca fotos.



Donde apuntes la cámara es una foto para almanaque. Todo está decorado al extemo y no queda lugar para colocar nada más. Esculturas, pinturas, mapas, fuentes, obeliscos,  monumenots por doquier. La sensación es de "sobreabundancia" de cosas materiales.

Más tarde fuimos a recorrer un poco de Roma. Por la noche conocimos la Fontana di Trevi


Lugar donde se filmó la película "La dolce vita" (no muy moderna :)).  Por donde camines en Roma, hay un lugar con miles de año de historia.

Por otro lado, al salir de Francia se notó la diferencia automáticamente. La calidez de los tanos contrasta claramente con la frialdad de los franceses. Italia es muy parecido a Argentina en muchas cosas, entre ellas el idioma y las comidas, los manteles para comer y la suciedad en las calles :). Es "primer mundo y medio" o eso parece... Todos los días comimos pastas o spaghettis.


Riquísimos...

A la noche, fuimos para el hostel a dormir un poco. Conocimos algunos argentinos pero nuestro contacto fue nulo porque teníamos que recorrer bien temprano el resto de la ciudad....

El otro día salimos bien temprano y conocimos el Coliseo y el foro romano. El foro romano es un lugar muy muy grande donde se discutía asuntos de Roma entre otras muchísimas actividades, como la prostitución, el circo, y el lugar donde los emperadores vivían. El Coliseo por supuesto se lleva todas las fichas. Pero además hay infinitos edificios de muchísima belleza cerca del mismo.


En la foto, un edificio de los tantos...

Por la noche, no nos pudimos perder la vista nocturna del Coliseo y sacarnos muchas fotos...


En este momento Fbk no me deja poner la foto en la cual estamos los cuatro que fuimos: Gustavo, Enzo y Emmanuel (siempre van juntos, los dos tandilenses :P)...

Para concluir, me gustó más la cultura italiana que la francesa y la verdad que se está muy bien allá, si bien no es tan primer mundo como en Francia (o por lo menos eso sentí..., tengo que volver a otras ciudades italianas muy pronto...)...